La obesidad es una enfermedad crónica, compleja y muy grave, que disminuye la calidad y el tiempo de vida del individuo que la sufre. Se calcula que la tercera parte de la población mundial tiene sobrepeso y obesidad.
México pertenece a las naciones con mayor obesidad en adultos en el mundo, esto de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) la cual está compuesta por 35 países alrededor del mundo, con representación de cada continente. Además de México, algunos países que la integran son Brasil, Chile, Turquía, Reino Unido, Australia, Grecia, Portugal y Sudáfrica.
La obesidad es una consecuencia del desequilibrio entre las calorías que ingresan y egresan diariamente en nuestro cuerpo. Este desequilibrio hace que el exceso de calorías se transformen en grasa y que se deposite en todos los órganos y sistemas de nuestro cuerpo causando obesidad y enfermedades asociadas como diabetes, hipertensión, colesterol y triglicéridos altos, apnea del sueño, dolores articulares, reflujo gastroesofágico entre otras patologías.
A la obesidad se la calcula mediante el índice de masa corporal (IMC) que es la relación existente entre el peso en kilogramos para la talla en metros al cuadrado del paciente. Siendo el IMC normal entre 18,5 a 24,9 kg/m2, sobrepeso entre 25 a 29,9 kg/m2, y obesidad todo IMC sobre 30 kg/m2.
Los problemas en la salud derivados de la obesidad pueden ser catastróficos a largo plazo, algunos investigadores han informado que la esperanza de vida en personas de 20 años con IMC de 45 kg/m2 es de 13 años menor para los varones de raza blanca y 20 años menor para los afroamericanos, comparado con los varones de peso normal.
Existen métodos médicos y quirúrgicos para tratar el sobrepeso y la obesidad. Los tratamientos médicos en base a la dieta y ejercicio tienen un porcentaje bajo de éxito (5-10%) a largo plazo. Los tratamientos quirúrgicos son efectivos en este sentido, sin embargo no están exentos de riesgos. Actualmente las indicaciones para cirugía bariátrica, siguen las reglas del Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos, que fueron dictadas en 1991. En donde se considera un paciente candidato quirúrgico cuando se calcula un IMC de 40 o más kg/m2 o de 35 a 39,9 kg/m2 más una comorbilidad.
Tradicionalmente, la perspectiva del médico cirujano especialista y su concepto de resultado positivo se basaban en la mejoría de la salud integral del paciente, en la pérdida de peso y, más recientemente, en la mejora de las patologías asociadas a la obesidad. Sin embargo, la perspectiva del paciente y su noción de resultado satisfactorio casi siempre se centraban, y siguen haciéndolo, en la mejora de la calidad de vida y la disminución de la discriminación. Por lo tanto se acerca a lo que la Organización Mundial de la Salud define como calidad de vida, que es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solo de ausencia de enfermedad.
2 Comentarios. Dejar nuevo
Quiero bajar 10 kg
Soy hipertensa
Tengo IMC 29.1
Que me recomienda
Favor de llamarme o escribirme directamente a mi celular 3339528555 soy el Dr. Saúl Ocampo.